Lo primero
que se te viene a la mente al recordar la carrera del pasado sábado 1 de
febrero, es que acabé hecho puré. Tan es así que en el kilómetro 10 me prometí
que no volvería más. Evidentemente cuando llegué a meta el sentimiento cambió
aunque lo antes vivido seguía rondando en la cabeza. Sabía a lo que iba pero
pagué la novatada.
Después de
un agradable viaje desde Albacete hasta el bonito pueblo e impresionante
entorno de Elche de la Sierra, hicimos lo reglamentario, comprar la candelaria
de nueces típica de San Blas, santo al que está dedicada la peña a la que
tuvimos que rodear con gran esfuerzo. Saludos, abrazos y fotos. Para muchos era
nuestra primera carrera en el circuito de este año (el “decimocatorce”) y la
emoción y el nerviosismo hacían su labor. Es de destacar la numerosa
participación, mucha gente corriendo, eso da mucho subidón sin duda.
La salida
fue impresionante, el gentío, los aplausos, los ánimos eran muchos. No es de
extrañar ya que nos dirigíamos al recorrido más duro que he corrido hasta la
fecha en el circuito… ¡Somos unos valientes! Y ¡qué deciros de las cuestas, de
los toboganes, de los sofocos, de terminar subiendo andando, en fin, de darlo
todo! No hay palabras para describir lo que se te pasa por la cabeza hasta que
llegas a la meta.
De esta
carrera me quedo con una serie de cosas: la primera es que tenemos equipo,
amplio, competitivo y popular por todos los puntos cardinales; somos más que un
club, somos una familia (grande el gesto de Perico hacia nuestra Gacela al que
me uno y seguro que todas y todos los verdinegros de corazón); y que el
sufrimiento une y nos pone en nuestro sitio.
Al terminar
la jornada, cuando nos íbamos estaban llegando los últimos corredores y
corredoras de la carrera. Observé que eran los más grandes, los que nunca se
dan por vencidos. Una de ellas llegó con un rostro en el que destacaba una
amplia sonrisa. El mejor premio de todos es la satisfacción del logro y esa era
la mejor imagen que me llevo de esta carrera. Son estas cosas las que explican
que amemos este deporte, que seamos “runners”, NO, mejor, corredores. Siempre
CORREDORES…
Siempre
vuestro.
Alfonso
“Perlita”.